La época en la que vivimos nos hace prestar mucha atención al ahorro en todas nuestras tareas cotidianas. Además, cada vez somos más conscientes del mal uso que le estamos dando a nuestros recursos naturales y de cómo estamos acabando con nuestro planeta. Pero, ¿Qué podemos hacer para ser más responsables y cuidar el medio ambiente?
Ahorrar nafta es una de las opciones que tenemos, sencillamente porque la quema de combustibles fósiles es una de las mayores responsables del desgaste de la capa de ozono. ¿Y si le decimos que además de ser responsables también ahorrarán dinero? Compara en casa te presenta 4 alternativas para ahorrar combustible, y reducir tus gastos:
1) Ser prudente al conducir
Hay pequeños trucos que podemos tener en cuenta para que el auto gaste menos nafta sin siquiera notarlo. Por ejemplo, cuidar mucho la presión de los neumáticos. Si cuentan con poco aire, obligan al automóvil a consumir más nafta. Por otro lado, acelerar de a poco es también una forma de gastar menos gasolina, en comparación de presionar el acelerador de una sola vez. Asimismo, la velocidad ideal para distancias largas debería ser de entre 90 km/h a los 120 km/h. Además, llevar las ventanillas completamente bajas hacen que el aire impulse al coche hacia atrás, lo que lo obliga a hacer más esfuerzo y por ende gastar más combustible. Si el aire acondicionado está por debajo de los 22 grados, también forzará al vehículo y producirá un mayor consumo. El peso en exceso también es un aspecto negativo, por eso, es conveniente no llevar demasiadas cosas, a menos que sea realmente necesario.
2) Tomar conciencia y usar el auto sólo cuando sea necesario
Hay que ser consciente y utilizar el auto sólo cuando sea extremadamente obligatorio. Pruebe ir caminando a lugares que no sean tan lejanos y en los de distancia media, reemplazar el vehículo por una bicicleta. Además de ahorrar gasolina, dinero y cuidar el planeta, también estarás haciendo un poco de ejercicio, que siempre es una excelente idea.
En caso de que utilices el vehículo dentro de la ciudad, apagá el motor cuando te detengas por más de dos minutos. Esto le hará bien a la parte mecánica del auto y ayudará en nuestro propósito de ser mejores ciudadanos.
3) Compartir los viajes
Hay casos en los que en una familia tiene más de un vehículo y cada quien usa el suyo durante los mismos períodos del día. Es necesario cambiar ciertos patrones de conducta, por lo que si se utiliza un solo vehículo a diario, el ahorro es significativo. Es bueno fijar una sola ruta y así todos pueden usar el mismo automóvil.
También podés llevar a tus vecinos o amigos desde el punto que estés hacia donde vayas, en los casos en que viajen en la misma dirección. Así pueden compartirse los gastos de combustible al mismo tiempo que te solidarizás con tus conocidos.
4) Utilizar más seguido el transporte público
Ir detrás del volante de tu propio automóvil es bastante cómodo pero utilizar el transporte público es una alternativa muy buena, sobre todo en ciudades donde el tráfico se convierte en la pesadilla de todo conductor.
En definitiva, todos tenemos en nuestras manos una responsabilidad muy grande, y a cada quien una opción le resulta más conveniente que otra. No olvides que con esta acción estamos protegiendo también nuestro futuro y el de otros.