Desde el pasado viernes finalmente cesaron las lluvias en la ciudad de Resistencia y el resto de las localidades de la provincia. De esa manera, se reactivaron los servicios municipales en pos de recuperar los espacios públicos anegados o afectados de alguna manera por las intensas lluvias de principio de enero.
En ese contexto, vecinos del barrio Monseñor de Carlo aseguraron a este medio que la plazoleta “Evita”, ubicada sobre calle Fontana, en una especie de mini-rotonda situada entre las arterias Cangallo y Echeverría, requiere de urgente intervención de las autoridades para ponerla en condiciones debido a la considerable altura que tiene actualmente el césped y que suele actuar como factor de proliferación de mosquitos y otros agentes transmisores de enfermedades.
“Primero las lluvias no dejaban a nuestros hijos salir a jugar y ahora que el clima les permite estar al aire libre no pueden jugar en su plazoleta porque el césped está muy alto y pueden ser picados por los mosquitos o por cualquier alimaña que no podemos ver así”, expresó una mujer sobre el paisaje en dicho pulmón ambiental.
Además, los vecinos consultados indicaron que los fines de semana la plazoleta amanece con varios residuos en su alrededor, fruto de las ocasionales “juntadas” de algunos jóvenes en horario nocturno. Por otro lado, solicitaron que se revise el estado general de algunos juegos infantiles que requieren refacciones.
Vale recordar que la plazoleta en cuestión está en un barrio donde el 19 de mayo de 1949 Eva Duarte de Perón, en su segunda visita al Chaco, inauguró la barriada que llevó su nombre hasta la época de la dictadura cívico militar, en donde pasó a llamarse Monseñor Carlo. En el lugar Evita izó la bandera argentina por primera vez, cuyo escenario fue utilizado por ella como epicentro para demostrar que Chaco reunía las condiciones para ser Provincia.
