Al menos seis presos murieron y otros ocho lograron escapar tras un motín que sucedió en el Presidio de Jussara, en el estado de Goiás, Brasil.
La revuelta ocurrió a última hora de la tarde del miércoles cuando agentes penitenciarios fueron tomados de rehenes por los internos, que posteriormente prendieron fuego en varias celdas.
Uno de los seis reclusos que perdieron la vida murió decapitado y otros dos carbonizados, informó la Superintendencia Ejecutiva de Administración Penitenciaria de Goiás, citada por EFE.