Los agentes de la Policía, Matías Morinigo y Lucas Bravo, recuperaron ayer su libertad. Ambos habían sido detenidos por la fuga de los cinco presos de la comisaría Primera de Sáenz Peña, de los cuales aún queda uno por recapturar.
Cabe recordar que el Fiscal Gustavo Valero, ordenó en la mañana del mismo día de la fuga, la detención de los dos policías ante la presunción que habría existido algún grado de “favorecimiento” para la evasión de los cinco alojados.
Ayer en horas de la mañana, los dos agentes que oficiaron de llaveros aquel 9 de noviembre, en el que cinco peligrosos detenidos en la Comisaría Primera de Sáenz Peña, lograron escapar sin violentar ninguna reja ni medida de seguridad -según se indicó tras el peritaje del lugar- recuperaron su libertad tras la presentación de un escrito con copia del Reglamento Policial, por parte del abogado defensor de Bravo, César Collado.
El mismo, establece que ningún agente de la Policía puede oficiar de llavero, sin un año de experiencia, y en este caso, tanto Morínigo como Bravo, tenían seis meses y estaban al cuidado de 23 detenidos de los cuales siete son de extrema peligrosidad, indicó Collado.
El profesional presentó además un escrito en la fecha con copia de una disposición del Director de Zona Interior, comisario Fernando Romero donde se ordena la prohibición para oficiar de llaveros de comisarías a los agentes egresados del último curso.
Sin embargo, aunque ambos policías quedaron en libertad, continúan ligados al proceso.
