Greenpeace respondió al ministro de Producción del Chaco, Gabriel Tortarolo, quien, según aseguraron, intentó justificar la gran cantidad de desmontes ilegales en el territorio provincial.
“Hay evidente complicidad del gobierno del Chaco en la deforestación en bosques protegidos. Ya sea por no aplicar multas fuertes o por autorizar desmontes donde la ley nacional no lo permite”, declaró Hernán Giardini, coordinador de la campaña de Bosques de Greenpeace.
“Por eso precisamos que el Congreso Nacional debe sancionar en forma urgente la Ley de Delitos Forestales, para que empresarios y funcionarios que violan la Ley de Bosques vayan presos”.
En distintos medios periodísticos el funcionario declaró que “en general, las autorizaciones de cambios en el uso del suelo van con los estamentos y todo el proceso que establece la ley” y que es “utópico” pensar que se puede controlar el 100 por ciento de los bosques.
“La Ley Nacional de Bosques establece claramente que en zonas amarillas y rojas no se pueden otorgar permisos de desmontes. Su cumplimiento no es una utopía, es una obligación. Se tiene que terminar la impunidad de arrasar con los bosques”, aseveró Giardini.
De acuerdo al último informe publicado esta semana por la organización ecologista, Chaco es la provincia donde más se violó la Ley de Bosques durante el último semestre, recordando que se desmontaron 10.718 hectáreas de bosques protegidos.
