La Policía de Estados Unidos realizó un macabro hallazgo esta semana en la ciudad de Houston, Texas. En el interior de un departamento, constató la presencia de tres niños que llevaban meses viviendo junto al cadáver de su hermano de 9 años.

A raíz del descubrimiento se inició una investigación que permitió localizar a la madre de los pequeños y a su novio, quienes fueron detenidos por los delitos de “abandono” y “homicidio”, y son interrogados por la Justicia.

Fuentes del caso informaron que fue uno de los niños, de 15 años, quien llamó a la Policía del condado Harris el domingo y alertó que su hermano menor había muerto hacía cerca de un año y que el cuerpo estaba dentro del apartamento.

A partir de la comunicación, un grupo de agentes se trasladó a la vivienda y encontró al adolescente y a otros dos hermanos de 10 y 7 años que vivían solos en el domicilio, según detalló el jefe de policía del condado, Ed González. También se localizaron los restos óseos.

“Parece que los restos llevaban ahí un tiempo prolongado. Y destaco prolongado”, dijo González en rueda de prensa. El oficial agregó que también parecía que los niños se defendían entre sí y que el hermano mayor se ocupaba de los dos menores. Se desconoce si alguno asistía a la escuela.

El jefe policial agregó que los más pequeños parecían estar desnutridos y tenían lesiones físicas. Todos fueron trasladados a un hospital para ser evaluados y tratados, y quedaron bajo la custodia de los servicios de protección infantil.

Paralelamente, las autoridades iniciaron una investigación que permitió ubicar y detener ayer a la madre de los chicos y a su novio. Ambos fueron identificados como Gloria Y. Williams, de 35 años, y Brian Coulter, de 31, e imputados por los delitos de “abandono” y “homicidio”.

Tras la difusión del caso, los vecinos expresaron conmoción e incredulidad. Kayla Williams le dijo al Houston Chronicle que tiene dos hijos, pero que no planea contarles lo sucedido. “No necesito ponerles esto en la cabeza”, dijo. “Es una locura”.

LA NACION


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