El candidato a gobernador radical Ramón Mestre destacó esta mañana al votar en las elecciones cordobesas que ese comicio "no es un termómetro para la elección nacional". Con una sonrisa, el dirigente señaló que "vamos a ser prudentes y esperar hasta las 18", cuando le preguntaron sobre los resultados que espera, mientras saludaba a algunos partidarios acompañado por su esposa, Melina.

De buen humor, Mestre fue el primeros de los candidatos a gobernador en votar en Córdoba. El actual intendente de la capital sufragó pasadas las 8.30 en una jornada electoral que comenzó con algunas demoras en toda la provincia. El candidato radical se refirió al uso de la Boleta Única de Sufragio (BUS), que estuvo envuelta en algunas polémicas, y moderado, aseguró que "es “normal", destacando que no podía hablar demasiado sobre cuestiones políticas por la veda electoral.

El intendente cordobés se mostró cauto a la hora de hablar con el nutrido grupo de periodistas que lo esperaba en la puerta del colegio I.P.E.M. N° 150 “Juan Larrea”, ubicado sobre calle Luis Braile en Barrio Sarmiento de la Capital provincial. Allí remarcó en varias oportunidades que esta “es una elección local, no un termómetro nacional”.

“Estamos votando autoridades de Córdoba, esta elección no es un termómetro de la elección nacional”, insistió. “Es una elección 100 por ciento vinculada a nuestra ciudad y a todas las ciudades que eligen autoridades”, agregó. “Ahora tenemos que ser cautos sobre conjeturas o en hablar sobre lo que pasó porque estamos en veda. El resto de los análisis los haremos después de las 18”, señaló el candidato de la Lista 3 quien además le pidió a los cordobeses “que voten con alegría”.

Después de las 18, se espera que Mestre se dirija hacia la Casa Radical ubicada en pleno centro de la ciudad, donde aguardará la llegada de los resultados de los comicios en compañía del belvillense Carlos Briner, su candidato a vice y a Rodrigo de Loredo, el candidato a intendente del radicalismo, entre otros dirigentes.


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