En la mañana de este martes, se conoció el fallo que absolvió a Alexis Fleitas, Franco Sosa, Agustín Díaz y Enzo Gómez, los cuatro policías de Charata que estaban acusados por la muerte de Leandro Bravo, que se produjo en febrero de 2022.
El juicio, que comenzó el 14 de octubre, culminó con el fallo tras la defensa de los agentes que argumentó la falta de pruebas que vincularan a los policías con el hecho. Los mismos fueron detenidos tras el hecho, pero durante el juicio se encontraban en libertad, con el respaldo de la defensa que argumentó la falta de pruebas definitivas.
Leandro Bravo, de 37 años, fue detenido por tres policías en la calle y, tras ser subido al patrullero se descompensó. Fue trasladado al hospital local, donde ingresó sin vida, presentando lesiones en el rostro, hombros, muñecas y piernas.
El hecho
Bravo, de 37 años, falleció bajo custodia policial tras ser detenido en la vía pública, pero las lesiones que presentaba no fueron atribuidas a los acusados según los testimonios presentados.
Durante el proceso judicial, la defensa de los agentes sostuvo que no existieron pruebas contundentes que conectaran a los policías con la muerte de Bravo, quien falleció bajo custodia policial tras haber sido detenido el 26 de febrero de 2022 en la vía pública.
El abogado de la defensa, César Collado, destacó que los testimonios de los testigos fueron consistentes.
"No hubo ninguna golpiza, ni asfixia mecánica por compresión de cuello, ni uso de tonfa, escopeta o técnicas de lucha, como el "brazo de la llave", en la intervención policial.
"Los testigos fueron consistentes en señalar que no hubo golpiza, no hubo asfixia mecánica por compresión de cuello, ni ahorcamiento, ni con tonfa, ni con escopeta, ni con brazos de la llave", aseveró.
