El ministro de Economía, Martín Guzmán, reiteró este lunes su defensa de la política de endeudamiento en pesos, aseguró que es «absolutamente sostenible» y desechó las versiones de un posible «reperfilamiento» de sus vencimientos.

El titular del Palacio de Hacienda remarcó la importancia de la reducción de déficit fiscal «en la Argentina de hoy» ante la necesidad de «ir ordenando el Estado», razón por la que sostuvo que «no se puede comparar la capacidad financiera de la Argentina con la de Estados Unidos» para hacer frente a los desequilibrios.

«Esto que alguien pueda venir y reperfilar la deuda en pesos no es creíble», manifestó el ministro.

En declaraciones a Radio con Vos, Guzmán volvió a destacar «la necesidad de acumular más reservas internacionales», y recordó que, históricamente, en la Argentina «cuando faltaron los dólares, hubo inflación».

«Lo que termina definiendo la capacidad de crecer es la cantidad de divisas con las que se cuenta», agregó el funcionario, además de destacar el reciente comunicado del Fondo Monetario Internacional (FMI), en el que se señala que «la deuda pública en pesos es un pilar del programa de 30 meses».

Guzmán remarcó que «no es casual que el Fondo diga eso», y afirmó que esa señal de certeza «le importa tanto a la Argentina como a los acreedores internacionales».

Asimismo, defendió la autoridad del presidente Alberto Fernández, y remarcó que «es una obviedad» que los ministros hacen lo que el jefe de Estado dispone.

«El Presidente manifestó que hay un programa económico y que sobre ese programa se va a avanzar; conduce y conduce con autoridad y se hace lo que el Presidente viene diciendo», subrayó el ministro.

No obstante, señaló que «eso no quita que haya situaciones en las que sería valioso poder agilizar la gestión», en referencia a las demoras en la presentación del formulario para acceder a los subsidios en el marco de la segmentación tarifaria que, aseguró, «antes del 1º de julio tiene que estar».

«Hay diferencias que se han hecho públicas y a veces esas diferencias no permiten que se anclen las expectativas, eso sí es un problema», acotó Guzmán, al tiempo que puso como ejemplo las discusiones que hubo en 2021, por las que «nadie terminó viendo el ordenamiento fiscal tan importante que se hizo, y eso vale mucho».

En la víspera de una nueva licitación de títulos públicos, el titular de la cartera económica buscó dar una señal de tranquilidad al mercado, y rechazó cualquier posibilidad de reperfilamiento al decir que «la deuda es absolutamente sostenible, en la medida que se pueda refinanciar».

En ese sentido, remarcó la importancia de conformar un mercado de financiamiento en moneda doméstica, y sostuvo que «la deuda en pesos es un ancla del funcionamiento de todo el sistema, un activo seguro», a la vez de «permitir esta transición fiscal que debe desembocar en un equilibrio».

En cuanto a los temores por un crecimiento del nivel de esa deuda en pesos, advirtió que «en términos nominales, la deuda crece en todo el mundo», pero que al mismo tiempo «la recaudación también crece» y con ello la capacidad de pago.

Al respecto, resaltó que «en términos de producto» la deuda en el último año «cayó mucho, unos 30 puntos porcentuales».

«Gobierne quien gobierne la Argentina, no va a tener alternativas a fortalecer el mercado de crédito en nuestra propia moneda, el peso», enfatizó Guzmán, además de advertir que «a nadie le va a convenir generar lío con ese asunto».

Asimismo, recomendó tener en cuenta tanto los gastos como los ingresos extraordinarios para hacer las comparaciones interanuales de las cuentas públicas.

En ese sentido, indicó que no se puede analizar el comportamiento del gasto «sin tener en cuenta que la política fiscal del segundo trimestre tuvo que ser muy expansiva para lidiar con los efectos de la guerra en Ucrania» y derivó en erogaciones extraordinarias por el refuerzo de ingresos y el bono a los jubilados.

«Sin esos componentes, la comparación sería otra», advirtió el ministro, además de señalar que en la confrontación de los ingresos debe tenerse en cuenta que el año pasado se computó el Aporte Solidario y Extraordinario.

Al planteársele las diferencias dentro del Frente de Todos acerca de la importancia de reducir o no el déficit fiscal y la comparación con otros países, precisó que a diferencia de esos casos en la Argentina «el Estado tiene que ir ordenándose».

«Por eso es importante en la Argentina de hoy que el déficit fiscal se reduzca, no podemos comparar la capacidad financiera de la Argentina con la de Estados Unidos», puntualizó Guzmán.


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