Hoy por la mañana, una mujer de 43 años, oriunda de la localidad bonaerense de Tigre, fue condenada a un año de prisión en suspenso por el Juzgado Penal y Contravencional N°8, a cargo de la jueza Natalia Molina, por el delito de grooming. Su víctima: un chico de 15 años que reside en la Ciudad de Buenos Aires. El lugar donde ocurrió el hecho: el popular juego online Brawl Stars.

Según fuentes de la causa, investigada por la fiscal Daniela Dupuy, titular de la Unidad Fiscal Especializada en Delitos y Contravenciones Informáticas del Ministerio Público Fiscal porteño, la misma que logró la condena a diez años de cárcel del médico Ricardo Russo, la mujer se hacía pasar por una adolescente y se conectaba, a través de la plataforma virtual de juegos, con el menor de 15 años. Le enviaba mensajes, fotos y videos con contenidos sexuales y eróticos, a la vez que le pedía a la víctima que le envíe imágenes a ella.

El caso comenzó en febrero de este año, tras la denuncia del padre del chico. Se descubrió que la mujer pasó de la plataforma de juegos a mensajes privados en Instagram. Desde allí, le envió frases, audios e imágenes de índole sexual y le manifestó sus deseos de mantener un encuentro.

Facebook, por su parte, aportó la información de la cuenta de Instagram desde donde se enviaban los chats, lo que permitió identificarla. Se descubrió que la mujer es madre de dos menores. El caso así se vuelve una rareza: los acusados de delitos de grooming son hombres casi en su totalidad.

La casa de la mujer fue allanada y le secuestraron todos sus dispositivos electrónicos, un procedimiento de la División Delitos Cibernéticos Contra la Niñez y Adolescencia de la PFA.

La mujer aceptó su culpa en un juicio abreviado: también se le impuso no contactar al chico, realización de tareas comunitarias y de un taller de violencia intra-familiar y de género.


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